The Bible teaches that all people have sinned and come short of the glory of God (Romans 3:23). This means that the perfect standard God has set for righteousness has been broken by every human being living on earth. It means that sin is evil and deserves punishment in such a degree as it relates to the character and nature of God Himself. Sin is not only the outward acts people perform, such as adultery, murder, theft, lying, abuse, greed, pride, gossip, sexual perversion, coveting and things like these. Those things are the outward manifestations of an inward rebellion against righteousness, even against God Himself. The Bible speaks of God as totally holy, righteous, good, merciful, gracious and pure. The reason many are so quick to assume that “no good God could allow so much evil in the world,” can only be because our standard of right and wrong does not match His. This is why so many falsely accuse God of wrong, because they do not believe He measures up to their own standard. The problem is not that God looks unjust to man, but that man is unjust before a perfectly just and holy God. Man is on trial, not God, and so we are accountable to God, not only for every deed, but for every word and thought as well. Therefore all mankind are said to be totally corrupt in their heart from birth (Genesis 6:5; Psalm 51:5; Romans 3:10-12). This is our sinful state apart from God.
We read in Romans chapter one: “For the wrath of God is uncovered from heaven against all the ungodliness and injustice of people who hold back the truth by their wrong doing. Because that which is well-known about God is clear to them, since God has shown it to them. For the invisible things of God and His eternal power and Godhood are already understood. They have been fully seen by the works done in the creation of the world, so that they have no excuse. For although they knew God, they did not think of His glory and praise or give Him thanks, but they became thoughtless and dark in their stupid heart. Claiming to be wise, they became fools.” (Romans 1:18-22). They exchanged God for a lie.
Cómo Conocer a Dios
La Biblia enseña a que toda gente han pecado y quedarse corto [está fuera destituida] de la gloria de Dios (Romanos 3:23). Esto significa que la estandar perfecto [de rectitude] que Dios ha puso para justicia [establecido,] ha sido quebrado por cada persona [quebrantado por cada ser humano] que vive en la tierra. Significa que el pecado es malo y es digno de castigo al grado de tal manera que afecta al carácter y a la naturaleza de Dios mismo. El pecado es no solamente hechos externos, de tal como adulterio, matar, robar, mentiroso, abuso, avaricia, orgullo, chismoso, perversión sexual, codicia y cosas como este. Estas cosas son el manifestación externo del rebelión interno contra justicia, aun contra Dios mismo. La Biblia habla de Dios como totalmente santo, justo, bueno, misericordioso, puro y llena de la gracia. El razón muchos son tan rapído asumir que "Ningún Dios bueno puede permite tan mucha maldad en la tierra," puede solamente estar porque nuestro estándar de derecho y mal no está de acuerdo con Suyo. Esto es por qué tan muchas acusan a Dios falsamente con maldad, porque ellos no creo que Él está de acuerdo con sus estándar. La problema no es que Dios parece injusto al hombres, sino que hombres son injusto delante de un Dios perfecto y justo. El hombre está ser sometido a juicio, no Dios, y así que somos responsables, no sólo para cada acto, sino para cada palabra y pensamos también. Por tanto toda de humanidad son dicho ser corrumpido totalmente en el corazón desde nacimiento (Génesis 6:5; Salmo 51:5; Romanos 3:10-12). Esto es nuestro estado pecaminoso aparte de Dios.
Leemos en Romanos capítulo uno: "Porque la ira de Dios se revela desde el cielo contra toda impiedad e injusticia de los hombres que detienen con injusticia la verdad; porque lo que de Dios se conoce les es manifiesto, pues Dios se lo manifestó. Porque las cosas invisibles de él, su eterno poder y deidad, se hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas hechas, de modo que no tienen excusa. Pues habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni le dieron gracias, sino que se envanecieron en sus razonamientos, y su necio corazón fue entenebrecido. Profesando ser sabios, se hicieron necios" (Romanos 1:18-22). Ellos cambiaron a Dios para una mentira.